La Ilustración permitió al hombre alcanzar la “mayoría de edad” gracias al uso de la Razón. Una vez despojado de creencias religiosas y de supersticiones, el hombre, en pleno uso de su libertad y juicio crítico, debe otorgarse una moral autónoma y autosuficiente, ajena a condicionantes externos.
¿Cuándo podemos calificar una acción de moral? Cuando la acción ha sido guiada por el imperativo categórico, principio ético de vocación universal que busca que todos seamos fines y no objetos o instrumentos. Según Kant, el imperativo categórico nos obliga a actuar de modo absoluto e incondicional: “Obra sólo de forma que puedas desear que la máxima de tu acción se convierta en una ley universal”.
The Enlightment allowed humankind to reach “adulthood” thanks to the use of Reason. Once divested of religious beliefs and superstitions, humankind, in full possession of its liberty and critical judgment, must confer itself an autonomous and self-sufficient morality, alien to external constraints.
When can we describe an action as moral? When the action has been guided by the categorical imperative, ethical principle of universal vocation that wants us to be aims and not objects or instruments. According to Kant, the categorical imperative makes us act in an absolute and unconditional way: “Act only according to that maxim by which you can at the same time will that it should become a universal law”.